En este artículo te proponemos un método que es una alternativa válida a los productos para descalcificar y limpiar el horno. Sigue leyendo para descubrirlo.
Para poner en práctica el método necesitamos una olla apta para cocinar en el horno. Son ollas que aguantan temperaturas muy altas, casi siempre de cerámica, esteatita, hierro fundido o acero inoxidable.
Llena la olla con agua, luego vierte medio vaso de vinagre y el jugo de un limón. El vapor de esta solución ayudará a descalcificar el horno y neutralizar los malos olores.
Pon el horno a 250 grados, luego mete la olla y déjala actuar por 30 minutos.
Inmediatamente después, apaga el horno y déjalo enfriar. Antes de que se enfríe por completo, con cuidado de no quemarte, utiliza un paño o esponja para retirar todos los residuos, que se desprenderán fácilmente.
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