ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT

Descubre la magia de mezclar leche condensada con maicena y chocolate

Disuelve la maicena: Comience disolviendo la maicena en una taza de agua fría o leche para asegurarse de que no queden grumos. Este paso es crucial para lograr una textura suave en su postre final.

Calentar la leche condensada: Vierte la leche condensada en una cacerola y caliéntala suavemente a fuego medio. Tenga cuidado de no dejar que hierva para evitar que se queme.

Agrega chocolate: Una vez que la leche condensada esté tibia, agregue las chispas de chocolate o el chocolate picado. Revuelva continuamente hasta que el chocolate se haya derretido por completo y la mezcla esté suave.

Combine la mezcla de maicena: Agregue lentamente la maicena disuelta a la cacerola mientras revuelve continuamente. Sigue revolviendo a fuego medio hasta que la mezcla se espese hasta alcanzar la consistencia deseada. Si lo desea, agregue un chorrito de extracto de vainilla o una pizca de sal para realzar los sabores.

Enfriar y servir: Vierte la mezcla en un plato o molde y deja enfriar. Una vez que esté listo, puede cortarlo en rodajas y servirlo tal cual, o agregar aderezos como crema batida, nueces o fruta fresca para darle un toque extra.

Conclusión
Esta sencilla receta de leche condensada, maicena y chocolate no solo crea un postre sorprendentemente delicioso, sino que también es fácil de hacer y perfecta para cualquier ocasión. El resultado es una delicia suave, cremosa y achocolatada que seguramente satisfará a cualquier goloso. ¡Pruébalo y puede que encuentres tu nuevo postre favorito!

ADVERTISEMENT

ADVERTISEMENT

Leave a Comment