– Retirar el molde del horno, forrarlo con papel de horno o papel vegetal.
– Coloca los palitos de papas fritas encima. El truco es espaciarlos para que no se peguen.
– Vuelve a introducir la bandeja en el horno precalentado a 220°C. Pasados 10 minutos, comprueba la cocción. Asegúrate de darles la vuelta para que se cocinen también por el otro lado. Pasados otros 10-12 minutos, tus patatas fritas estarán listas.
Nota: otra versión consiste en hervirlas muy ligeramente antes de meterlas al horno. Una vez más, hay que repetir el proceso anterior con las claras de huevo y las especias.
¡Eso es todo, ahora tienes un método perfecto para hacer papas fritas doradas y esponjosas sin tener que escurrir el aceite de cocina!
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