Prepara la masa:
En un tazón grande, combine la harina y la sal.
En otro bol, bata los huevos y luego agregue la leche y 1 cucharada de aceite de oliva o mantequilla derretida. Si te gusta un toque de sabor, puedes agregar una cucharadita de extracto de vainilla o una pizca de canela aquí.
Vierta los ingredientes líquidos en los ingredientes secos, batiendo continuamente para crear una masa suave y sin grumos.
Calentar la sartén:
Calienta una sartén antiadherente o un molde para crepes a fuego medio. Agregue una pequeña cantidad de mantequilla o aceite para cubrir la superficie.
Cocina los crepes:
Vierta una pequeña cantidad de masa en el centro de la sartén caliente. Incline y agite inmediatamente la sartén para distribuir la masa de manera uniforme por la superficie.
Cocine durante aproximadamente 1 a 2 minutos hasta que los bordes de la crepe comiencen a verse secos y se levanten de los lados de la sartén. Use una espátula para voltear suavemente la crepe y cocine por un minuto más por el otro lado hasta que esté dorada y ligeramente crujiente.
Servir:
Retira la crepe de la sartén y colócala en un plato. Continúe con la masa restante, agregando mantequilla o aceite a la sartén según sea necesario entre crepes.
Sirve las crepas calientes. Para una versión salada, rellénelos con ingredientes como queso, jamón y espinacas. De postre, puedes rellenarlos con fruta fresca, un chorrito de miel o una pizca de canela.
Consejos para crepes perfectos:
Consistencia: La masa debe ser bastante fina, similar a la crema espesa. Si está demasiado espeso, agregue un poco más de leche para lograr la consistencia deseada.
Reposar la masa: Si tienes tiempo, deja reposar la masa durante unos 30 minutos a temperatura ambiente antes de cocinarla. Esto ayuda a que la harina absorba el líquido y puede hacer que las crepas sean más tiernas.
Cocción: Asegúrese de que la sartén no esté demasiado caliente, ya que puede hacer que las crepas se cocinen demasiado rápido y sean difíciles de voltear.
¡Disfruta de tus deliciosos crepes caseros! Son una comida fantástica y rápida que se puede personalizar para adaptarse a cualquier gusto, lo que los hace perfectos para cualquier ocasión.
ADVERTISEMENT