Alivio respiratorio:
La quema de hojas de laurel libera vapores con propiedades expectorantes, que pueden ayudar a aliviar la congestión nasal y limpiar el tracto respiratorio.
Estos vapores también eliminan los microorganismos transportados por el aire, lo que favorece un aire más limpio y una respiración más fácil.
Mejora cognitiva:
El aroma de las hojas de laurel quemadas puede mejorar la función cognitiva y la claridad mental, ayudando a mejorar el enfoque y la concentración.
La inhalación de los vapores puede proporcionar una sensación de alerta y mayor conciencia.
Alivio del dolor de cabeza:
Las hojas de laurel contienen compuestos con propiedades antiinflamatorias, lo que las hace eficaces para aliviar dolores de cabeza y migrañas.
Los efectos sedantes y ansiolíticos de estos compuestos también pueden ayudar a aliviar el estrés y la tensión, contribuyendo al alivio del dolor de cabeza.
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