Preparación
- Comienza calentando 200 mililitros de leche y/o agua. Puede utilizar leche, agua o una combinación de ambas según sus preferencias.
- Una vez que el líquido esté caliente, agrégale media cucharada de azúcar y una cucharadita de sal. Remueve bien hasta que el azúcar y la sal se disuelvan.
- A continuación, agregue 10 gramos de levadura seca a la mezcla. Revuelva suavemente y déjelo reposar durante unos minutos hasta que la levadura se active y comience a formar espuma.
- En un tazón aparte, combine la mezcla de levadura activada con la cantidad deseada de harina. Puedes usar harina para todo uso o harina para pan para esta receta.
- Mezclar todo hasta que se forme una masa suave y ligeramente pegajosa. No te preocupes si la masa se siente un poco pegajosa, ya que se volverá más manejable a medida que sigas amasando.
Amasar y dar forma al pan
- Una vez que la masa se una, transfiérala a una superficie limpia y ligeramente enharinada. Amasar la masa durante unos 5 minutos hasta que quede suave y elástica.
- Divida la masa en porciones iguales y déles forma de rondas pequeñas o de la forma que desee. También puedes enrollar la masa en tiras largas para hacer palitos de pan si lo prefieres.
- Coloque la masa moldeada en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino o una estera para hornear de silicona. Deje un poco de espacio entre cada pieza para permitir que suban.
- Cubre la masa con un paño de cocina limpio y déjala reposar unos 5 minutos. Durante este tiempo, la masa subirá ligeramente y se volverá más hinchada.
Cocer el pan al vapor
- Mientras reposa la masa, prepare una olla grande con una cesta vaporera o una rejilla resistente al calor colocada en el fondo. Agrega agua a la olla, asegurándote de que no toque la canasta vaporera o la rejilla.
- Una vez que la masa haya reposado, transfiérala con cuidado a la canasta vaporera o a la rejilla de la olla. Cubre la olla con una tapa para atrapar el vapor y crear un ambiente húmedo para que se hornee el pan.
- Cocine el pan al vapor durante unos 10 minutos a fuego medio. El vapor ayudará a que el pan se cocine y suba, dando como resultado una textura suave y esponjosa.
- Pasados los 10 minutos, retira la olla del fuego y destapa. Saque con cuidado el pan al vapor con unas pinzas o una espátula. Ten cuidado porque el pan estará caliente.
Disfrutando de tu pan casero
Ahora que tu pan fácil y rápido está listo, ¡es momento de disfrutarlo! Sirve el pan caliente con tus productos para untar favoritos, como mantequilla, mermelada o queso crema. También puedes usarlo para hacer sándwiches o tostarlo para obtener una textura crujiente.
Ya sea que estés organizando un brunch, te apetezca un refrigerio o simplemente quieras darte un capricho con pan recién horneado, esta receta es perfecta para ti. En sólo 10 minutos, podrás tener una barra de pan calentita y saciante sin necesidad de horno. ¡Pruébalo e impresiona a tu familia y amigos con tus habilidades para hacer pan casero!