Esta es la foto del después. ¡Es difícil creer que sea la misma cocina!
Tanya quitó los gabinetes superiores y los reemplazó con estantes abiertos, luego le dio a los gabinetes inferiores restantes una capa de pintura turquesa, inspirada en su colección de utensilios de cocina Pyrex, que se pueden ver exhibidos en los estantes.
Se renovaron las paredes con paneles de yeso y paneles de madera, y se pintó todo. También reemplazaron las encimeras por otras de madera y pusieron un fregadero y accesorios nuevos.
El piso no se modificó, pero la diferencia es bastante sorprendente. ¡Ahora se ve mucho más luminoso y abierto!
Y cambiar de los tonos más amarillos de la madera al turquesa más frío también hace que parezca más claro y limpio.
Además, los estantes abiertos proporcionan almacenamiento sin parecer demasiado abarrotados.
La ventana, sin cortinas ni persianas, deja entrar mucha luz y contribuye a la sensación de apertura de la habitación.
¡Y ahora, Tanya puede mostrar su colección Pyrex!
El diseño y color que colecciona se llama butterprint y sirvió como inspiración para toda la habitación.
Como puedes ver, también ha reunido muchos otros elementos de colores combinados para darle personalidad a la habitación. Los platos de uso diario están guardados en los estantes inferiores para tenerlos a mano fácilmente.
En la casa del lago
Las pequeñas pinturas de paisajes sobre la estufa provienen de Hungría, y los demás vasos, platos y cuencos probablemente también tengan sus propias historias.
¡Tanya incluso logró encontrar una licuadora turquesa!
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